Más información sobre la sal marina

Si se usa con moderación, la sal marina puede ser un gran aliado del organismo

Sal marina

Imagen de Oreana Tomassini en Pixabay

La química describe que la sal es cualquier producto resultante de la reacción entre un ácido y una base, y cuando se disuelve en agua libera un catión diferente del H + y un anión diferente del OH-. En el caso de la sal que consumimos, el cloruro de sodio (NaCl), es el producto de la reacción entre el ácido clorhídrico y el hidróxido de sodio.

La sal es una sustancia vital para los seres humanos; nuestro cuerpo tiene sales que son reguladas por los riñones y la transpiración. El sodio participa en la contracción muscular, incluidos los latidos del corazón, los impulsos nerviosos y la ingesta de proteínas. El cloro (cloruro) preserva el equilibrio de bases ácidas en el cuerpo, ayuda en la absorción de potasio, es la base del ácido del estómago y ayuda en el transporte de dióxidos de carbono de las células a los pulmones, donde se liberan. Sin embargo, su uso excesivo puede traer graves consecuencias para el organismo.

La sal se puede clasificar según su composición y procesamiento (común, refinado y marino) y características de grano (grueso, tamizado, triturado y molido), cada uno con sus especificaciones definidas por la legislación.

¿Qué es la sal marina?

Además de refinada, la sal marina también está formada por cloruro de sodio y se obtiene de la evaporación del agua de mar. Sin embargo, no pasa por el proceso de refinamiento, lo que le hace retener minerales y nutrientes y prescindir de la adición de otros ingredientes químicos. La sal marina se vende en su color natural, que varía entre blanco, gris, negro o rosa. La sal gruesa y la sal rosada del Himalaya son algunos ejemplos de sales marinas.

¿Por qué la sal marina es más saludable que la refinada?

Debido a que no pasa por el proceso de refinación química y contiene menos sodio, la sal marina es más saludable que la refinada. Para volverse refinada y blanca, la sal pasa por un largo proceso de calentamiento y refinamiento que hace que pierda casi todo su valor nutricional y tiene que recibir una serie de aditivos, como el yodo.

La sal marina, a su vez, no necesita pasar por este proceso químico, manteniendo sus nutrientes y eliminando activos. Además, la sal marina contiene menos sodio que la refinada.

Cabe mencionar que independientemente de que sea refinado o marino, el consumo de sal en exceso puede ocasionar problemas como hipertensión, enfermedades cardiovasculares y cálculos renales. La sal marina es beneficiosa solo cuando se toma con moderación.

¿Cuál es la diferencia entre la sal marina y la sal rosada del Himalaya?

Aunque no se extrae directamente del mar, la sal rosa del Himalaya es un tipo de sal marina. Como sugiere su nombre, se extrae de depósitos antiguos en las cordilleras del Himalaya. Debido a que no se somete a un proceso químico, mantiene sus características originales, incluidos el color y los nutrientes.

¿Cuáles son los beneficios para la salud de la sal marina?

Si se usa con moderación, la sal puede ser un gran aliado para el organismo. Descubra cuándo es beneficioso para su salud:

  • El proceso para hacer que la sal sea refinada y blanca elimina muchos de sus nutrientes. Sin embargo, incluso en cantidades mínimas, la sal marina contiene calcio, potasio, zinc, hierro y yodo.
  • Los minerales presentes en la sal marina son los encargados de mantener su color y sabor. Por lo tanto, puede usarse en cantidades más pequeñas y, sin embargo, agregará un sabor adicional a los alimentos.
  • Con menos sodio, la sal marina resulta ser una mejor opción para mantener el equilibrio de electrolitos sin sobrecargar los riñones.
  • Con un consumo moderado, la sal marina puede ser un aliado en la prevención de enfermedades, ya que promueve la alcalinización de los fluidos corporales, contribuyendo al equilibrio hidroelectrolítico y estabilización del pH corporal.

¿Cuánto se debe consumir diariamente?

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda una ingesta máxima diaria de sodio de cinco gramos, lo que equivale aproximadamente a una cucharadita. Sin embargo, las personas mayores de 50 años y con antecedentes de enfermedad cardiovascular deben consumir hasta la mitad de esa cantidad.

Además, debes prestar atención a la etiqueta del producto antes de consumirlo. Esto se debe a que si la etiqueta indica la adición de conservantes, aglutinantes o agentes blanqueadores, no es una sal marina completa y estas ventajas pueden no corresponder a este producto.


Fuente: Química en la cocina.

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