¿Cuál es el camino hacia la longevidad?

El proceso de reciclaje celular podría ser el camino hacia la longevidad

Longevidad

Imagen: Val Vesa en Unsplash

La longevidad es una de las mayores obsesiones del ser humano. Vivir más tiempo y envejecer de forma saludable son dos desafíos a los que se enfrentan constantemente la medicina y la ciencia, que ya han dado grandes pasos, con ganancias en la esperanza de vida, pero se sabe muy poco sobre el proceso de envejecimiento en sí. Un estudio, publicado en la revista Nature , logró relacionar el proceso de envejecimiento con la velocidad con la que los mamíferos pueden procesar los desechos celulares: cuanto más rápida es la limpieza, mayor es la longevidad.

La investigación, dirigida por Salwa Sebti y Álvaro Fernández, investigadores postdoctorales del Center for Autophagy Research del Southwestern Medical Center de la Universidad de Texas, encontró que los ratones con mejores niveles de autofagocitosis (el proceso por el cual las células descartan sustancias tóxicas) o los no deseados que dañan la salud celular) viven más y con mejor salud. En otras palabras: cuanto más rápido el cuerpo recicla sus desechos, mayor es el tiempo y la calidad de vida.

Beth Levine, directora del Centro de Investigación de la Autofagia y una de las participantes del estudio, explica que los ratones más eficientes con fagosomas (que son las células que limpian el cuerpo) vivían aproximadamente un 10% más y tenían menos probabilidades de desarrollar cánceres. y enfermedades cardíacas y hepáticas relacionadas con el envejecimiento. La conclusión se basa en veinte años de estudios realizados en el centro de investigación, que permitieron la creación de ratones modificados genéticamente para tener un organismo más eficiente.

El primer paso fue cuando el grupo descubrió la enzima beclin, que ayuda a los fagosomas a acelerar su velocidad, desempeñando un papel muy importante en la autofagocitosis y, en consecuencia, en el envejecimiento. Desde entonces, el centro de investigación ha logrado demostrar que la autofagocitosis juega un papel fundamental en la salud humana, pudiendo prevenir enfermedades neurodegenerativas, cáncer e infecciones. Lo que ha quedado claro es que mejorar el rendimiento de la autofagocitosis es una forma importante de ampliar la esperanza de vida. El proceso pierde rendimiento con el envejecimiento, lo que contribuye al envejecimiento mismo, en un círculo vicioso.

Ahora, los investigadores han demostrado que, además de aumentar la esperanza de vida, contar con un mecanismo de limpieza corporal, como el reciclaje de residuos celulares, también mejora la calidad de vida de los mamíferos. La respuesta vino a través de cambios genéticos en la enzima beclin, que tiene su función detenida por un inhibidor llamado BCL2. La alteración genética de Beclin significó que este inhibidor ya no podía unirse a la enzima, lo que permitió un proceso de autofagocitosis más rápido y eficiente. Es decir: una limpieza profunda y rápida.

A partir de ahí, crearon ratones transgénicos con esta enzima mejorada y observaron su ciclo de vida. Como era de esperar, estos ratones tuvieron mejores niveles de autofagocitosis desde el nacimiento en todos sus órganos. Estos animales tenían un mayor nivel de protección contra una especie de Alzheimer presente en ratas, y ahora se ha comprobado que la mejor limpieza celular ha hecho que estos animales vivan más y mejor.

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En el experimento, los científicos dejaron que un grupo de 102 ratones mutantes y 68 normales envejecieran de forma natural. Los normales envejecieron y empezaron a morir a los 15 meses. Después de 30 meses, todos los ratones normales estaban muertos. Los mutantes comenzaron a morir más tarde, a los 22 meses, y todos murieron a los 40 meses. El resultado indica que los cambios realizados en el beclin aumentaron la supervivencia de las ratas en aproximadamente 5 meses, lo que equivale a un aumento del 16% en la esperanza de vida. En un ser humano con una esperanza de vida de 80 años, eso equivaldría a vivir unos 12 años más.

El estudio señala un camino importante para la salud humana y para el desarrollo de nuevos fármacos capaces de mejorar nuestro mecanismo de reciclaje celular. De la misma forma que la ciencia puede ayudar a mejorar nuestro mecanismo de limpieza interior, sigue siendo importante el cuidado con la cantidad de basura que ponemos en nuestro cuerpo. El grupo de investigadores debe trabajar ahora en fármacos capaces de mejorar el mecanismo de autofagocitosis, en busca de ganancias para la humanidad en calidad de vida y longevidad.