Muy apreciados por su contenido en vitaminas, minerales y proteínas, los brotes de alfalfa se pueden producir en casa
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La alfalfa, también conocida como Medicago sativa , es una planta muy apreciada por su contenido superior en vitaminas, minerales y proteínas, en comparación con otras fuentes alimenticias. Pertenece a la familia de las leguminosas, así como las judías, las lentejas y los garbanzos. Se cree que la alfalfa se origina en el sur y centro de Asia, pero su cultivo se ha estado produciendo en varias regiones del mundo durante siglos.
Además de usarse como alimento, también tiene una larga historia de uso como hierba medicinal para humanos y como alimento para ganado. Sus semillas u hojas secas se pueden tomar como suplemento, o las semillas se pueden germinar y comer en forma de brotes de alfalfa, lo que aumenta aún más su potencial nutricional y vitamínico. Obtenga más información sobre este tema en el artículo: "Los increíbles beneficios de cultivar brotes comestibles".
Contenido nutricional
Los seres humanos generalmente consumen alfalfa como un suplemento de hierbas o en forma de brotes de alfalfa. Por lo general, son ricos en vitamina K, vitamina C, cobre, manganeso y ácido fólico.
- ¿Qué es la vitamina C y cuál es su importancia?
- Vitamina C: 5% de la IDR (ingesta diaria recomendada)
- Cobre: 3% de IDR
- Manganeso: 3% de IDR
- Folato: 3% de IDR
- Tiamina: 2% de IDR
- Riboflavina: 2% de la IDR
- Magnesio: 2% de IDR
- Hierro: 2% de la IDR
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Puede ayudar a reducir el colesterol
Un estudio de 15 personas encontró que, en promedio, comer 40 gramos de semillas de alfalfa tres veces al día reduce el colesterol total en un 17% y el colesterol LDL considerado "malo" en un 18% después de ocho semanas.
Otro pequeño estudio realizado con tres voluntarios concluyó que 160 gramos de semillas de alfalfa al día podrían disminuir los niveles de colesterol total en sangre. Este efecto se atribuyó al alto contenido de saponinas, que se componen de plantas conocidas por reducir los niveles de colesterol.
Mejora la salud metabólica
Un uso tradicional de la alfalfa es como agente antidiabético. Un estudio en animales encontró que los suplementos de alfalfa redujeron los niveles altos de colesterol total, LDL y VLDL en animales diabéticos y mejoraron el control del azúcar en sangre.
Otro estudio en ratones diabéticos encontró que el extracto de alfalfa redujo los niveles de azúcar en sangre, aumentando la liberación de insulina del páncreas.
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Alivia los síntomas de la menopausia.
La alfalfa es rica en compuestos vegetales llamados fitoestrógenos, que son químicamente similares a la hormona estrógeno. Esto significa que pueden causar algunos de los mismos efectos en el cuerpo que los estrógenos. Los fitoestrógenos son controvertidos, pero pueden tener varios beneficios, incluido el alivio de los síntomas de la menopausia causados por la disminución de los niveles de estrógeno.
Los efectos de la alfalfa sobre los síntomas de la menopausia no se han investigado exhaustivamente, pero un estudio encontró que los extractos de salvia y alfalfa pudieron mejorar por completo los sudores nocturnos y los sofocos en 20 mujeres.
Los efectos estrogénicos también pueden tener otros beneficios. Un estudio de sobrevivientes de cáncer de mama encontró que las mujeres que comían alfalfa tenían menos problemas para dormir.
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Efectos antioxidantes
La alfalfa tiene una larga historia de uso en la medicina ayurvédica para tratar afecciones causadas por inflamación y daño oxidativo. Eso es porque es un poderoso antioxidante que previene el daño causado por los radicales libres.
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- ¿Qué son los radicales libres?
Algunos estudios han encontrado que la alfalfa tiene la capacidad de reducir la muerte celular y el daño al ADN causado por los radicales libres. Esto sucede al reducir la producción de radicales libres y mejorar la capacidad del cuerpo para combatirlos (consulte aquí los estudios sobre esto: 2, 3, 4, 5).
Un estudio en ratones encontró que el tratamiento con alfalfa podría ayudar a reducir el daño causado por un derrame cerebral o daño cerebral.
Efectos colaterales
Aunque la alfalfa probablemente sea segura para la mayoría de las personas, puede causar efectos secundarios dañinos para algunas personas. La alfalfa puede provocar estimulación o contracciones uterinas. Por lo tanto, debe evitarse durante el embarazo (consulte el estudio aquí: 6).
Los brotes de alfalfa son ricos en vitamina K. Aunque esto beneficia a la mayoría de las personas, puede ser peligroso para quienes toman medicamentos anticoagulantes, como la warfarina, porque la vitamina K hace que estos medicamentos sean menos efectivos (consulte un estudio aquí: 7).
La alfalfa también está contraindicada para quienes tienen lupus o algún otro trastorno autoinmune. Se han informado casos de que los suplementos de alfalfa han provocado que el lupus se reactive en algunas personas. En un estudio con monos, los suplementos de alfalfa causaron síntomas similares al lupus.
Se cree que este efecto se debe a posibles efectos inmunoestimuladores del aminoácido l-cavanina, que se encuentra en la alfalfa.
Las condiciones de humedad necesarias para que broten las semillas de alfalfa son ideales para el crecimiento bacteriano. En consecuencia, los brotes que se venden en las tiendas a veces están contaminados por bacterias, y en el pasado se han asociado varios brotes bacterianos con brotes de alfalfa (ver estudio aquí: 8).
Comer brotes contaminados puede enfermarlo, pero la mayoría de los adultos sanos se recuperan sin consecuencias a largo plazo. Sin embargo, para las personas con un sistema inmunológico comprometido, una infección como esta puede ser muy grave.
Por lo tanto, la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos) aconseja a los niños, las mujeres embarazadas, los ancianos o cualquier otra persona con un sistema inmunológico comprometido con la prevención de los brotes de alfalfa.
Cómo agregar alfalfa a tu dieta
Los suplementos de alfalfa se pueden utilizar en forma de polvo, en pastillas o para preparar té. Pero es difícil recomendar una dosis segura o eficaz.
Otra forma de agregar alfalfa a su dieta es comerla como si fueran brotes. Los brotes de alfalfa se pueden agregar a su dieta de muchas maneras, agregándolos a sándwiches, ensaladas, sopas y otros platos.
Puedes comprarlos en tiendas naturistas o producirlos en casa. Aprende a plantar brotes de alfalfa en casa en el campo: "Kit Broto Fácil te permite germinar semillas en casa con practicidad".
Adaptado de Taylor Jones
