¿Qué es la Evaluación del ciclo de vida (LCA) del producto?

La evaluación del ciclo de vida es una técnica desarrollada para verificar el impacto de los productos en el medio ambiente.

ciclo de vida del producto

Imagen redimensionada de Thomas Lambert, disponible en Unsplash

¿Qué es la evaluación del ciclo de vida (LCA)?

La evaluación del ciclo de vida (LCA) es una técnica desarrollada para verificar el impacto de los productos en el medio ambiente. En LCA se analizan los efectos ambientales asociados a las actividades productivas a lo largo del ciclo de vida del producto.

Este tipo de evaluación surgió en la década de 1970, cuando la empresa Coca-Cola encargó un estudio al Midwest Research Institute (MRI) para comparar los diferentes tipos de envases de refrescos y seleccionar cuáles eran los más respetuosos con el medio ambiente y el medio ambiente. desempeño en la preservación de los recursos naturales.

La Evaluación del Ciclo de Vida (LCA) se rige por las normas ISO 14040, creadas por la Asociación Brasileña de Normas Técnicas (ABNT). Según un estudio realizado en la Universidad Tecnológica Federal de Paraná, este tipo de evaluación ayuda a identificar oportunidades de mejora en los aspectos ambientales de los productos en las distintas etapas de su ciclo de vida, con el objetivo de minimizar el uso de elementos tóxicos, reducir el consumo. agua y energía, reducir la generación de residuos (y encontrar soluciones para utilizarlos como subproductos), reducir costos dentro del proceso, evaluar el uso de maquinaria y equipos, y gestionar otras actividades ambientales relacionadas con el proceso industrial, entre otras factores.

Desde la LCA, la industria puede verificar qué está haciendo mal en términos ambientales, tratando de corregir fallas; y el consumidor puede elegir, dentro de sus posibilidades, productos de empresas que se adapten a una lógica más sostenible.

Casos

Un caso muy práctico se puede observar en el estudio realizado por la Universidad Federal de Paraná (UFPR), que comparó los impactos ambientales provocados por el uso de envases de PET en relación a los de aluminio, utilizando la metodología de Evaluación del Ciclo de Vida. El estudio reveló que los envases de PET tienen un impacto más negativo en el medio ambiente en comparación con el aluminio, porque estos últimos tienen una mayor reducción cuantitativa de energía en el consumo de recursos naturales, en la emisión de contaminantes atmosféricos y en la generación de residuos sólidos. El estudio también encontró que, en términos de 'consumo de recursos naturales renovables y no renovables', el PET es el envase que presenta el peor escenario.

Otro caso muy relacionado con la vida cotidiana es la comparación entre el uso de bolsas de plástico y bolsas de papel reciclado. Según un estudio de Franklin Associates , con el objetivo de evaluar los impactos energéticos y ambientales del uso de polietileno y bolsas de papel sin blanquear, los resultados mostraron que la energía requerida para la producción de bolsas plásticas era del 20%. 40% menos que para producir la bolsa de papel; Las emisiones atmosféricas de las bolsas de plástico fueron aproximadamente un 63% a un 7% más bajas que las del papel. Sin embargo, las bolsas de plástico enfrentan problemas al final del ciclo.

También hay un concepto que está estrechamente relacionado con la Evaluación del Ciclo de Vida, que son los "seis errores de la sostenibilidad". Según un artículo publicado por el Instituto Brasileño de Información en Ciencia y Tecnología (IBICT), estos son los pasos para planificar un nuevo producto o mejorar uno existente. El pensamiento se basa en los siguientes conceptos:

Repensar:

Examine el producto para que sea lo más eficaz posible;

Reiniciar (reemplazar):

Verificar la posibilidad de reemplazar un artículo que sea tóxico por otro que tenga menos impacto en la salud humana y el medio ambiente;

Reparar:

Desarrollar un producto que pueda reparar sus partes o partes;

Reducir:

Piense en una forma de reducir el consumo de materias primas, energía, agua y la emisión de contaminantes;

Reutilizar:

Piense en un producto que tiene partes o materiales que se pueden volver a utilizar;

Reciclar:

Transformar los productos y materiales que serían desechados en materias primas o en nuevos productos con otros usos.

El lado del consumidor

La evaluación del ciclo de vida del producto es una metodología utilizada por empresas y gobiernos. Sin embargo, en la vida diaria, podemos incorporar una actitud similar a la Evaluación del Ciclo de Vida (LCA). A la hora de consumir, podemos tener en cuenta el ciclo de vida del producto y dar preferencia a productos naturales con menor impacto ambiental. Cuando tratamos de utilizar productos naturales, producidos localmente o que tienen sellos verdes, demostramos conciencia de consumir artículos que han sido certificados por utilizar métodos que preservan el medio ambiente. La búsqueda de productos que sean reciclables también es fundamental, ya que de esta manera contribuimos al aumento del ciclo de vida de este producto en particular. Pon en práctica el consumo consciente. Obtenga más información sobre este tema en el artículo: "¿Qué es el consumo consciente?".


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