Hace uso del mayor enemigo de los ingenieros y arquitectos, la vorticidad
Una empresa española llamada Vortex Bladeless propone una nueva forma de generar energía eólica diferente a la convencional. Se trata del Vortex , un aerogenerador sin palas (ni hélices) parecido a una "paja gigante" que, según sus creadores, llegó a cambiar el mundo de las energías renovables.
La idea surgió después de que David Suriol siguiera un video del puente Tacoma Narrows oscilando con la fuerza del viento.
La apariencia puede ser engañosa, pero incluso sin las hélices, el Vortex puede transformar la brisa del aire en energía, pero de una manera diferente. En lugar de utilizar el movimiento circular que hacen las palas, la nueva turbina utiliza la llamada vorticidad, un efecto aerodinámico que produce el patrón de vórtices giratorios. La vorticidad ha sido considerada el mayor enemigo de los arquitectos e ingenieros, que hacen todo lo posible para evitar estos torbellinos en ciertos tipos de edificios. Sin embargo, los fundadores de Vortex Bladeless , David Suriol, David Yáñez y Raul Martín, vieron esto como una oportunidad.
La forma del Vortex fue desarrollada para asegurar que los vientos giratorios viajen, en sincronía, a lo largo de la expansión del mástil, con el fin de obtener un buen desempeño.
Su prototipo actual está fabricado en fibra de vidrio y fibra de carbono, lo que le permite vibrar al máximo. En la base del cono se colocaron dos imanes repelentes, que actúan como un motor no eléctrico. Cuando el cono oscila hacia un lado, los imanes lo tiran en el otro sentido, como un pequeño impulso en su movimiento sin tener que contar con la velocidad del viento. Esta energía cinética luego se convierte en electricidad mediante un alternador que multiplica la frecuencia de oscilación del mástil para mejorar la eficiencia de obtención de energía.
Los creadores están orgullosos del hecho de que la turbina no necesita engranajes, tornillos o piezas mecánicas, ya que esto abarata el precio de producción y mantenimiento de la turbina. Según ellos, la versión mini de 12 metros puede captar el 40% de la energía eólica en condiciones ideales (41 km / h). Según las pruebas de campo, el mini captura un 30% menos que las turbinas eólicas tradicionales, pero se compensa por su tamaño, lo que significa que puede colocar el doble de mini turbinas Vortex en el mismo lugar que una turbina tradicional. Según la empresa, la turbina costaría un 51% menos que las turbinas tradicionales, cuyos mayores costos provienen de las palas y los sistemas de soporte.
El nuevo modelo también es silencioso y más seguro para las aves. Con las turbinas tradicionales, miles de animales terminan muriendo anualmente en todo el mundo.
La empresa ya logró recaudar un millón de dólares en capital privado y financiación gubernamental. La tecnología aún tiene que avanzar mucho para llegar al consumidor. Según Wired , Suriol dice que las turbinas tradicionales no tienen nada de malo, incluso garantiza que son grandes máquinas, pero que solo están proponiendo una forma nueva y diferente de obtener energía eólica.
