¿Qué es la Economía Solidaria?

La Economía Solidaria es un modo de producción diferente, que replantea la relación con la ganancia. ¡Descubra cómo funciona!

economía solidaria

Perry Grone en la imagen Unsplash

La Economía Solidaria es una forma autónoma de gestionar los recursos humanos y naturales para que las desigualdades sociales se reduzcan a medio y largo plazo. La ventaja de la Economía Solidaria es que replantea la relación con el lucro, transformando todo el trabajo generado en beneficio de la sociedad en su conjunto, y no solo de una parte de ella.

Entendiendo la economía solidaria

En la Economía Capitalista, los ganadores acumulan ventajas y los perdedores acumulan desventajas para futuras competencias.

Para que tengamos una sociedad en la que predomine la igualdad entre todos los integrantes, sería necesario que la economía fuera más solidaria que competitiva. Esto significa que los participantes en la actividad económica deben cooperar entre sí en lugar de competir.

La Economía Solidaria solo se puede realizar si la organizan en partes iguales quienes se asocian para producir, comerciar, consumir o ahorrar. La clave de esta propuesta es la asociación entre iguales en lugar del contrato entre desiguales. En la cooperativa de producción, prototipo de empresa solidaria, todos los socios tienen la misma participación de capital y los mismos derechos de voto en todas las decisiones. Este es el principio básico de la Economía Solidaria. Si la cooperativa necesita directores, todos son elegidos por todos y son responsables ante ellos. No hay competencia entre los socios y, si la cooperativa progresa y acumula capital, todos ganan por igual.

La idea de la Economía Solidaria es hacer que la sociedad sea menos desigual. Pero, incluso si todas las cooperativas colaboraran entre sí, inevitablemente algunas empeorarían y otras mejorarían, debido al azar y a las diferencias de habilidad e inclinación de las personas que las componen. Por tanto, habría empresas ganadoras y perdedoras. Sus ventajas y desventajas tendrían que combinarse periódicamente para no volverse acumulativas, lo que requiere que el poder estatal redistribuya el dinero de los ganadores a los perdedores a través de impuestos, subsidios o crédito.

Como funciona el pago

En la empresa solidaria, los socios no perciben salario, sino retiro, que varía según los ingresos obtenidos. Los miembros deciden colectivamente en asamblea si las retiradas deben ser iguales o diferenciadas. Muchas empresas solidarias establecen límites entre el menor y el mayor retiro. Pero hay una tendencia a que las empresas solidarias paguen más por el trabajo mental que por el trabajo manual para no perder la colaboración de trabajadores más cualificados. Se supone que pagar mejores técnicos y administradores permite a la cooperativa lograr mayores ganancias que benefician a todos los miembros, incluidos aquellos con retiros menores.

La cuestión de las ganancias

Puede parecer que no importa trabajar en una empresa solidaria o en un capitalista por la diferencia de retiros (ganancias). Pero la principal diferencia es la forma de lidiar con las ganancias. En la empresa capitalista, los salarios se escalonan con miras a maximizar el beneficio, ya que las decisiones las toman los directivos que participan en los beneficios y cuya posición se ve amenazada si la empresa que dirigen obtiene una tasa de ganancia inferior a la media de las empresas capitalistas. .

En la empresa solidaria, la programación de los retiros la deciden los socios, que tienen como objetivo asegurar buenos retiros para todos y especialmente para la mayoría que recibe los retiros más pequeños.

En las cooperativas, las sobras tienen su destino decidido por la junta de accionistas. Una parte de ellos se coloca en un fondo de educación (de los propios socios o de personas que pueden formar cooperativas), otra parte se coloca en fondos de inversión, que pueden ser divisibles (compartidos entre los socios) o indivisibles (no compartidos entre los socios). ), y lo que queda se distribuye en efectivo a los socios por algún criterio aprobado por la mayoría: igualmente, por el tamaño del retiro, por la contribución que se le da a la cooperativa, etc.

El fondo divisible se utiliza para expandir el patrimonio de la cooperativa y se contabiliza individualmente para cada socio, utilizando el mismo criterio para asignar la parte del excedente pagado en efectivo. La cooperativa contabiliza los intereses del fondo divisible, siempre a la tasa más baja del mercado. Cuando un socio se retira de la cooperativa, tiene derecho a recibir su parte del fondo divisible más los intereses que se le abonan. El fondo indivisible no pertenece a los socios que lo acumularon, sino a la cooperativa en su conjunto. Los compañeros de trabajo que se retiran no reciben nada de él.

Los recién llegados a la empresa solidaria deben pasar una prueba de apoyo para recibir los mismos beneficios que los veteranos. Esta prueba suele oscilar entre seis meses y un año. El fondo indivisible indica que la empresa no solo está al servicio de sus socios actuales, sino al servicio de la sociedad en su conjunto, ahora y en el futuro.

La Economía Solidaria es un modo de producción alternativo, cuyos principios básicos son la propiedad colectiva o asociada del capital y el derecho a la libertad.