La tabla de surf tiene muchos impactos ambientales

Los primeros modelos de tablas de surf se hicieron con madera nativa de las islas del Pacífico.

tabla de surf

Si practicas o admiras el surf, es posible que ya te hayas preguntado de qué están hechas las tablas que se utilizan en este deporte, que también es un modo de ocio muy popular en las playas de todo el mundo.

Las primeras tablas de surf fabricadas por hawaianos fueron producidas con madera de árboles típicos de las islas del Océano Pacífico, como ula, koa y wili wili. Sin embargo, a lo largo de los años se han desarrollado nuevos materiales más ligeros y resistentes.

Tableros modernos: composición

Actualmente, los tableros están compuestos básicamente por tres materiales: espuma (de poliuretano o poliestireno), fibra de vidrio y resina.

El poliuretano (PU) es un tipo de espuma rígida que forma el núcleo de la tabla de surf, es decir, es su relleno principal. Ciertos tipos de tabla de surf pueden incluir el larguero central, que no es más que una pieza vertical de madera, encajado en el medio de la tabla para asegurar una mayor resistencia y rigidez longitudinal, además de facilitar la forma de la tabla. navegar.

La tabla de surf también está fabricada con materiales de refuerzo. Las más utilizadas son las fibras de vidrio junto con la resina líquida para formar el laminado del tablero. Estos materiales sirven para dar mayor resistencia y para controlar la rigidez de la tabla de surf.

Según el artículo de Tobias Schultz para la web Sustainable Surf Coalition , realizado en 2011, hay dos tipos de tablas de surf que se fabrican más ampliamente: el modelo fabricado con núcleo de poliuretano y resina de poliéster insaturado, junto con el MEKP (que representa el 85% de los tableros fabricados en la actualidad), y el tablero fabricado con núcleo de espuma de poliestireno expandido y resina epoxi.

Tablista

El impacto medioambiental de la tabla de surf

Durante el proceso de fabricación de su tabla de surf, ocurren varios impactos. Desde 1958, la mayoría de las tablas (85%) se han fabricado con espuma de poliuretano. Este material se considera inerte y libre de componentes tóxicos. Sin embargo, el proceso de fabricación es muy rico en carbono, que libera una gran cantidad de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera, además de otros gases que contribuyen al efecto invernadero, según el artículo de Tobias Schultz. El autor también afirma que la liberación de gases de efecto invernadero ocurre durante todas las etapas del proceso de fabricación de PU y que, en el pasado, el proceso llegó a utilizar CFC (lo que no ha ocurrido desde la década de 1990).

La fibra de vidrio proviene de la arena, por lo que no tendría muchos problemas ambientales. Sucede que el material a menudo se trata con metales pesados, como el cromo, y se vuelve tóxico para los humanos. Para producir el laminado del tablero (una especie de “piel”), la fibra de vidrio se mezcla con una resina de poliéster, junto con un solvente muy corrosivo (estireno). Este disolvente es cancerígeno y está clasificado como compuesto orgánico volátil (COV).

Según Schultz, cuando se usa un COV para tratar la resina, sus vapores se liberan y sus componentes se incorporan a la resina tratada. Por tanto, el producto final contiene COV que seguirán siendo eliminados durante el proceso de descomposición de esta resina tratada.

Los COV irritan la nariz, la piel, los ojos, la garganta y los pulmones y pueden causar daño al sistema nervioso central cuando se inhalan en grandes cantidades. En el medio ambiente, los COV se unen a los óxidos de nitrógeno en el aire para formar ozono troposférico, que es uno de los principales componentes del smog fotoquímico o la famosa contaminación del aire.

El exceso de resina y suciedad de la tabla de surf se elimina con acetona, que también emite COV. Todo ello sin contar otros productos nocivos, como pinturas, diluyentes y catalizadores, como el peróxido de metiletilcetona (o MEKP), utilizados en la elaboración de tableros.

Todo esto demuestra lo dañina que es la fabricación de tableros de poliuretano. Pero incluso los tableros hechos con espuma de poliestireno expandido y resina epoxi eliminan los COV, aunque en una cantidad mucho menor. Los estudios demuestran que la resina epoxi tiene un 75% menos de COV en su composición y elimina aproximadamente 2/3 menos de COV en la atmósfera, en comparación con la resina de poliéster.

Un solo tablero usa mucho material

Sumado a todo esto, el proceso de producción de una sola tabla de surf desperdicia del 50% al 70% de materia prima, es decir, para producir una tabla con un peso final igual a 3,1 kg, se utiliza una media de 10 , 8 kg de diversos materiales. La mayoría de estos desechos son tóxicos, inflamables o tienen un período de descomposición indefinido. Por tanto, cuando se descartan inconscientemente, se convierten en agentes de amenaza para el medio ambiente y la salud pública.

¿Que hacer?

Para descubrir alternativas para surfear de forma más ecológica, echa un vistazo al artículo: "Bioespuma, latas de aluminio, restos de skate: conoce las opciones de tablas sostenibles".


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