Aprenda a hacer ñame y cuáles son los beneficios de este tubérculo nutritivo y saludable
El ñame, también conocido como taro, ñame blanco y taioba-de-são-tomé, es un tubérculo nutricional muy popular y ampliamente consumido en el mundo. Cultivado desde el 50.000 a. C., en África y Asia, ahora es un alimento básico en muchos países de América del Sur, África, las Islas del Pacífico y las Indias Occidentales. En Brasil, la región Nordeste es el mayor productor y consumidor.
Hay más de 600 especies de ñame, pero solo unas pocas se consideran comestibles; las no comestibles generalmente se usan con fines medicinales. Muchas de las propiedades medicinales del ñame se deben a la acción de la diosgenina, un fitosterol de gran interés para la industria farmacéutica.
El consumo de tubérculos, relacionados con el ñame y la batata, mejora el funcionamiento del sistema inmunológico, la calidad de la sangre y, al ser altamente nutritivo y moderadamente calórico, es una buena opción para quienes quieren adelgazar. Los tubérculos son una excelente fuente de fibra soluble y sus carbohidratos son complejos. Contienen vitamina A y betacaroteno, cantidades importantes de vitamina C y son ricas en vitaminas B. En cuanto a minerales, tienen potasio, hierro, calcio, fósforo, magnesio y cobre. Obtenga más información sobre los beneficios del ñame:
Bueno para la salud del corazón
Las fibras del ñame reducen los niveles de colesterol en la sangre, lo que ayuda a prevenir enfermedades cardíacas. Además, el ñame es una buena fuente de potasio, un mineral que compensa las acciones hipertensivas del sodio en nuestro organismo.
Fortalece el sistema inmunológico.
El ñame fortalece los ganglios linfáticos, que son responsables de defender el sistema inmunológico, fortalecer el cuerpo y prevenir enfermedades. Las enfermedades virales, como la malaria, el dengue y la fiebre amarilla, se pueden prevenir con el consumo de ñame, ya que ayuda a prevenir la contaminación de la sangre (pero no es por eso que debe dejar de tomar todas las vacunas). Los compuestos antioxidantes del ñame - betacaroteno y vitamina C - ayudan a prevenir los más variados tipos de cáncer y, al ser fuente de diosgenina y vitaminas B6 y B9, es un gran alimento para ayudar en el control y prevención del Alzheimer.
Gran aliado de la salud de la mujer
Debido a que tiene fitoestrógenos y hormonas vegetales, se sabe que el ñame aumenta la fertilidad de las mujeres, alivia los calambres menstruales, los síntomas del síndrome premenstrual y la menopausia (la diosgenina presente en el tubérculo puede ayudar a contener el calor, la sequedad de la mucosa y otros síntomas que acompañan a esta fase) y estimulan la libido, además de ser útil en endometriosis, enfermedad fibroquística de la mama y fibrosis uterina. Un estudio también encontró que comer ñame durante 30 días equilibra los niveles hormonales.
Ayuda a perder peso
El ñame es una excelente opción alimenticia para quienes desean perder peso. Además de contener poca grasa, sus fibras favorecen la sensación de saciedad y sus nutrientes aportan más energía. Además, el ñame tiene propiedades antiinflamatorias, lo que hace que el cuerpo sea menos susceptible a la acumulación de líquidos y toxinas, disminuyendo la celulitis y la hinchazón.
Previene la anemia
El ñame es un buen alimento para prevenir la anemia. Es fuente de hierro, mineral que participa en el proceso de transporte de oxígeno, realizado por los glóbulos rojos; cobre, que ayuda a acceder al hierro almacenado, de modo que pueda utilizarse en la síntesis de nuevos glóbulos rojos; vitamina C, que ayuda a la absorción de hierro; vitamina B6, esencial para la producción de hemoglobina; y ácido fólico, que ayuda en el proceso de maduración de las células sanguíneas.
Además, el ñame también tiene otros beneficios, como ayudar en casos de uñas encarnadas, forúnculos y granitos, desinflar cicatrices, evitar dolores e hinchazón en quemaduras y sitios fracturados (cuando se usa externamente) y, debido a su poder desinflamatorio, se puede utilizar en hemorroides, artritis, varicela, reumatismo, pleuresía, neuralgia, neuritis y eczema. Comer ñame también ayuda a bajar la fiebre y a combatir la sinusitis y la apendicitis. Los antioxidantes contenidos en el ñame también ayudan a combatir la piel seca cuando se consume regularmente.
Cómo hacer ñame
Los alimentos como la mandioca y el ñame, que son raíces, no deben consumirse crudos porque contienen sustancias tóxicas. Para ello cocínelo y agréguelo en ensaladas o jugos, en sopas, patés, panes, tortas y tartas, fritos, asados, o en papilla hecha con su harina, acompañando verduras o solo, con aceite, sal y orégano.
- Ensalada: rallar, sazonar con aceite, sal y limón. Agregue otras verduras al gusto.
- Jugo: pelar, rallar y agregar el jugo de frutas.
- Cocido: cocine con piel y entero al vapor o presión. Pelar, sazonar con aceite de oliva, cebollino, perejil y jengibre al gusto.
Habla con tu médico sobre el uso de ñame. El funcionamiento del sistema endocrino es muy delicado e integrado, y la diosgenina del tubérculo puede alterarlo, aunque sea levemente. Las mujeres embarazadas y lactantes deben evitar consumir ñame. Siempre coma con moderación.
