Una especie de bacteria que reacciona con pH alto y agua es la base del experimento.
Las renovaciones en el hogar u oficina son la pesadilla de muchas personas. Pero el desorden, la suciedad, el ruido y el estrés aparentemente han terminado. Al menos parte de ellos. Los científicos holandeses han creado un tipo de hormigón que tiene la capacidad de "repararse" a sí mismo.
El producto consiste en una mezcla de biohormigón y bacterias. Al entrar en contacto con el agua, los microorganismos se activan y se alimentan del lactato de calcio, una sustancia presente en el hormigón. El calcio, el oxígeno y el dióxido de carbono que resultan de los alimentos cierran pequeñas grietas y agujeros.
Sin embargo, el mayor desafío fue encontrar una bacteria adecuada para la mezcla, ya que debería tener la capacidad de sobrevivir en un ambiente con pH alto, como es el caso del hormigón, y que podría pasar mucho tiempo durmiendo. La respuesta se encontró en Rusia, en lagos que también tienen un pH alto.
Lo interesante es que el agua, que normalmente estropearía el hormigón al traer productos químicos nocivos a este elemento, ayuda en su reparación.
Para obtener más información sobre el curioso experimento, visite el sitio web de la Universidad Tecnológica de Delft.
