Arcilla: para que sirve y beneficios

La arcilla se puede encontrar en diferentes versiones, siendo utilizada para tratamientos estéticos y medicinales.

Arcilla

Imagen de Velizar Ivanov sin Unsplash

La arcilla es un mineral de roca sedimentaria compuesto por granos muy finos de silicatos de aluminio, asociados a óxidos que le confieren diferentes tonalidades y propiedades. Los diversos tipos de arcilla se originan a partir de un conjunto de procesos físicos y químicos (que toman mucho tiempo) que modifican las rocas y alteran su forma física y composición química. Es a través de estos cambios que se forma la arcilla.

De amplia aplicación industrial, la arcilla se utiliza principalmente en la fabricación de baldosas cerámicas, vajilla, menaje y decoración, pero su uso ha ido aumentando cada vez más para tratamientos estéticos y medicinales, descubriéndose cada día nuevos beneficios de la arcilla.

La arcilla es una de las medicinas más antiguas conocidas por la humanidad. El filósofo Aristóteles ya se refirió a la arcilla como un recurso que conserva y trata la salud. Hipócrates, un médico griego considerado el padre de la medicina, usó y enseñó a sus discípulos el uso medicinal de la arcilla. En el antiguo Egipto, por otro lado, la arcilla se usaba en la momificación y conservación de manuscritos.

Proceso formativo

El proceso de formación de la arcilla se desarrolla básicamente en dos fases: desintegración y descomposición de la roca. Al desintegrarse, la roca se rompe en grietas por acción de agentes como el agua, la temperatura, la presión y el viento, progresando a partículas más pequeñas, sin cambiar su composición. En la descomposición se produce una modificación mineralógica de las rocas, principalmente por el agua que provoca oxidación, hidratación, carbonatación en las rocas y también por los efectos químicos derivados de la pudrición de plantas y animales. Las arcillas se forman debido a la descomposición del feldespato, que es un mineral que forma las rocas ígneas. Por lo general, la desintegración y la descomposición trabajan juntas, ya que la ruptura física de la roca permite la circulación de agua y agentes químicos.

Se forman dos tipos de arcilla: las primarias, que son las arcillas creadas por la descomposición de las rocas y que permanecen en el lugar donde se originaron, y las secundarias, que son aquellas cuyas partículas son transportadas por el viento o corriente de agua y depositadas en el orillas de los ríos. Estos lugares se conocen como depósitos de arcilla.

Por ser minerales, las arcillas tienen componentes muy valiosos en su composición, que son responsables de sus propiedades y de su uso con fines estéticos y terapéuticos.

El proceso de fabricación de la arcilla por estética y salud debe desarrollarse en un lugar limpio y aireado y el equipo utilizado debe estar siempre en buenas condiciones para evitar la contaminación del producto. En primer lugar, la arcilla se recoge del depósito, se almacena y se transporta a un secador para eliminar las impurezas que puedan influir en su calidad. Después del secado, la arcilla se muele y se tamiza para eliminar las partículas más grandes. El material se coloca en un recipiente limpio y aireado.

Componentes y beneficios de la arcilla.

Para comprender mejor las propiedades que tienen, primero es importante conocer los componentes que contienen las arcillas. Estas son las sustancias que tantos beneficios aportan a la arcilla y que hacen de los diferentes tipos de arcilla excelentes aliados en tratamientos estéticos y de salud. Los principales minerales arcillosos que se pueden encontrar en la composición química de la arcilla son:

Aluminio

Actúa contra la falta de tonicidad, tiene acción cicatrizante e inhibe el desarrollo de Staphylococcus aureus (bacteria que puede causar enfermedades, que van desde infecciones simples, como espinillas, furúnculos y celulitis, hasta infecciones graves, como neumonía y meningitis).

Planchar

Desempeña un papel importante en la respiración celular y la transferencia de electrones. En la piel, las deficiencias de este elemento se manifiestan por una epidermis fina, seca y con falta de elasticidad.

Magnesio

Tiene el poder de fijar los iones potasio y calcio y de mantener el gel celular, es decir, ayuda en la hidratación y síntesis de las fibras de colágeno. Obtenga más información en el artículo "Magnesio: ¿para qué sirve?".

Manganeso

Tiene acción específica sobre la biosíntesis de colágeno, antiinfecciosa, cicatrizante y antialérgica.

Silicio

Tiene un papel fundamental en la reconstitución de los tejidos cutáneos y en la defensa del tejido conectivo. Tiene acción hemostática, depurativa, astringente y remineralizante. Sobre la piel aporta hidratación, actúa contra la piel flácida y reduce la inflamación.

Sodio y potasio

Ayudan a mantener la hidratación y el equilibrio iónico de las células de la piel.

Tipos de arcilla

La calidad, así como la composición de los tipos de arcilla, depende mucho de la región donde se extraen. La concentración de minerales presentes en la arcilla es la responsable de definir su tipo y hacer que este material esté lleno de propiedades cosméticas.

Existen varios tipos de arcilla y cada una está indicada para un fin específico, por lo que es muy importante conocer su composición antes de usarlas. Cada tipo tiene una composición mineral diferente y es esta composición de numerosos componentes la que da a las arcillas diferentes colores. Puede encontrar arcilla verde, arcilla roja, arcilla rosa, arcilla blanca, arcilla negra, arcilla púrpura, arcilla amarilla, arcilla cremosa y también arcilla marrón; cada una tiene un propósito específico. Lea más sobre cada tipo en los artículos específicos:

  • Arcilla verde: para que sirve y beneficios
  • Arcilla amarilla: ¿para que sirve?
  • Arcilla roja: usos, propiedades y como aplicar
  • Arcilla blanca: ¿para que sirve?
  • Arcilla rosa: ideal para pieles sensibles
  • Arcilla beige: conoce sus propiedades y beneficios

Propiedades de la arcilla

Son las sales minerales presentes en su composición las que aportan las propiedades terapéuticas de la arcilla. Por tener elementos químicos similares a los del cuerpo humano, como el calcio y el hierro, tienen propiedades antiinflamatorias, cicatrizantes y desintoxicantes y sirven para muchas aplicaciones, aportando beneficios para la salud. Algunas de las propiedades de las arcillas son:

Absorción

La arcilla es absorbida fácilmente por la piel. Adquiere plasticidad al mezclarse con agua, quedando fácilmente moldeado. La pasta obtenida es eficaz en el tratamiento de la inflamación, el edema y la hinchazón.

Lanzamiento

Es fácil liberar elementos activos que forman parte de su constitución.

Adsorción

Consiste en un proceso físico-químico mediante el cual las arcillas dejan pasar moléculas y partículas microscópicas del medio para deslizarse hacia la piel; este proceso es muy útil en la fijación de toxinas presentes en el organismo para su posterior eliminación.

La concentración de ciertos minerales en la arcilla le confiere unas cualidades especiales que la hacen muy utilizada en tratamientos de belleza para eliminar celulitis y grasas localizadas, destapar poros, eliminar toxinas y regular la producción de sebo, además de actuar como desodorante, antirreumático y otros efectos. medicinal. En estética actúa como tónico corporal y ayuda en el drenaje linfático cuando se aplica en compresas. La arcilla en el cabello actúa como reductor de grasa y se utiliza para eliminar las impurezas.

Por ser productos naturales y puros, las arcillas no degradan el medio ambiente. Por sus diversas propiedades, el uso de arcillas puede traer muchos beneficios, no solo estéticos, sino también en la salud. Puedes encontrar arcillas 100% naturales en eCycle Store .


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